Las ciudades tienen una huella ecológica enorme dentro de los territorios y distintos municipios de todo el país, conscientes de su peso en el cambio climático, están ya trabajando en su estrategia para la transición energética como medida de adaptación.

Uno de los primeros pasos para los municipios es realizar una hoja de ruta para planear y diseñas la estrategia a seguir en el proceso de transición energética. La hoja de ruta suele constar de un análisis o diagnóstico de partida, una definición estratégica que suele incluir medidas de ahorro, eficiencia energética, uso de energías renovables, autoconsumo o generación distributiva y por último suele contar con aspectos transversales como la gobernanza y la participación ciudadanas.

En esta sesión se analizó cómo se incluyen los aspectos de las hojas de ruta en tres escalas fundamentales de los municipios: escala urbana, escala de barrio y escala de edificación.